Los Inicios
Desde los 15 a 18 años yo tuve varios trabajos. Uno era como asesor bilingüe en una empresa que se llama Teleperformance. Allí contestaba llamadas de clientes de Estados Unidos en inglés. Para ese entonces había aprendido inglés jugando videojuegos. Luego tomé un curso en una universidad pública de dos meses simplemente para corroborar que mi inglés era bueno y perfeccionar algunos detalles.
Este trabajo me sirvió para mejorar mi audición. Empecé a entender el inglés mucho mejor. También mi acento y mi habla mejoraron.
Aparte, mientras estudiaba la preparatoria desarrollé un pequeño negocio de consultorías. Primero daba asesorías uno a uno, ya que siempre me fue bien en la escuela de manera académica, con matemáticas, física y cualquier materia. Además, empecé a hacer grupos y ponía anuncios afuera del salón. Realmente todo lo que gané a los 15-18 años nunca lo toqué porque en ese entonces mi padre no tenía empleo, así que yo todo lo que ganaba se lo daba a mi familia.
Ingeniería mecánica
De los 18 a los 23 años me dediqué a estudiar ingeniería mecánica en una de las mejores universidades de Latinoamérica. El precio regular era muy elevado. Pero como siempre tuve un muy buen desempeño académico, me dieron una beca. Era una beca del 70%, donde 35% me iban a regalar y el otro 35% iba a ser un crédito. Lo tendría que pagar al graduarme y el 30% restante yo lo tenía que cubrir mes con mes.
Siempre tuve problemas para pagar la carrera porque no tenía dinero. Eran mensualidades muy elevadas de entre $5,000-$7,000 pesos. Yo era un estudiante sin muchos ingresos, y en ocasiones mi padre se quedaba desempleado y era un poco complicado.
La carrera duraba cuatro años y medio y yo la hice en cinco años. Me atrasé a pesar de que tenía los promedios más altos, pues no tenía dinero para cubrir tantas materias. Así que tenía que llevar carga mínima para poder pagar un poco menos y así poco a poco la saqué adelante.
Diversos empleos
A lo largo de esos cinco años tuve varios empleos o actividades que hacía además de estudiar. Fui empleado en un cine, trabajé un tiempo ahí, y luego empecé mi empresa de servicios para videojuegos en línea. La gente me pagaba por ayudarlos a subir de nivel en un videojuego muy popular en ese entonces.
En ese entonces por línea también daba servicios como de asesorías para que la gente mejorara en ese juego. Nos conectábamos en una videollamada y por ahí les enseñaba cómo lo hacía yo. Entonces eso primero lo hacía todo yo. Monté una página en internet y me hacía promoción en foros. Empecé a aprender cómo pagar anuncios en línea para atraer más clientes.
Luego lo escalé y en esa empresa empecé a contratar personas. De tal manera que yo recibía las órdenes de los clientes y le pagaba a alguien para que hiciera el trabajo por mí. Obviamente que a estas personas les pagaba menos y yo me quedaba con una diferencia.
Logré crecer y tener más o menos unos 20 empleados de todo el mundo. Me generó buenos ingresos que todo en ese momento se destinó al pago de mi colegiatura para poder cubrir las deudas. Así que todo ese dinero lo invertí en mi educación.
¿Cómo armé mi página web?
Para hacer ese sitio web yo no tenía capital ni recursos era solo un estudiante sin dinero así que aprendí en línea. Todo lo que encontré en internet lo consumí y fui aprendiendo sobre la marcha.
Un nuevo negocio
Cerca de finalizar la carrera empecé un negocio de distribución de productos de limpieza para fábricas o maquiladoras. Básicamente abrí una sucursal de una empresa en la ciudad donde yo vivía. Allí había alrededor de unas 800 máquinas o fábricas. Las contacté a todas, iba de manera presencial y les mostraba el producto.
También les llamaba por teléfono y empecé a aprender a vender. En ese entonces yo tenía un carrito para distribuir y pedía un camión con varias toneladas del trapo. Era trapo industrial para absorber líquidos, derrames de aceite, etcétera.
Llegaba un camión con costales de 25 kilos. Eran muy pesados. Entre yo y algunos amigos que me ayudaban los descargábamos en la cochera en tarimas. Recuerdo mucho que mis padres estaban enojados porque ocupaba el espacio de la cochera donde iba el carro. Por ello, a veces el carro se tenía que quedar afuera para que yo pudiera tener mi trapo.
Distribuía en el carrito que me prestaba mi papá, en donde cabían entre dos y cinco costales. Después que empezamos a tener ventas más grandes tenía que dar varias vueltas para entregar los pedidos.
Resultados
Realmente no generé muchos ingresos con ese negocio, pero en esa época terminé mi carrera. Tenía la deuda pues me dieron un crédito que yo tenía que pagar al final. Me daban tres meses para pagarlo y a mí me urgía empezar a generar algún ingreso ya que no tenía dinero y estaba próxima la mensualidad.
Por otra parte, me dieron mención honorífica y fui como el tercer promedio más alto de mi generación. No me fue difícil conseguir empleo. Meses antes de graduarme mandé cientos de solicitudes de empleo porque estaba desesperado.
Conseguí un buen empleo y tuve que dejar el negocio de la sucursal de productos de limpieza y me fui a otra ciudad a trabajar como ingeniero. Esto fue a los 23 años. Ahí me hice completamente independiente. Me fui de la casa de mis padres y comencé a cubrir todos mis gastos por cuenta propia con el sueldo que tenía de ingeniero.
Malas decisiones
Lamentablemente, a parte de la deuda que tenía, tomé malas decisiones financieras. En ese entonces no era bueno con el dinero, ya que nunca había ganado tanto en mi vida. Quería gastarlo, y por lo tanto me compré un carro nuevo de agencia muy caro. Me costó unos $350,000 pesos que sumado a lo que debía me generó una deuda muy alta.
Todo eso, más unas tarjetas de crédito que tenía, me daba unos $800,000 pesos de deuda más o menos. Así que además de trabajar de tiempo completo como ingeniero en una fábrica maquiladora empecé otro negocio.
Otro negocio nuevo
Se trataba de una comercializadora de productos que importaba desde China. Específicamente eran relojes y relojes inteligentes, yo pedía paquetes con muchos relojes y los comencé a vender en la ciudad. También hice anuncios en redes sociales y empecé a pagar por publicidad.
Empecé hacer envíos internacionales. Probé con MercadoLibre, pero cobraban demasiado. Igual que por el correo postal, pero tardaba mucho tiempo.
Logré duplicar mi inversión en unos meses, pero yo tuve que poner mucho trabajo. Me consumía mucho tiempo visitar a los clientes, empacar, mandar o entregar los pedidos. Todo el tiempo que le dedicaba era demasiado, entonces lo dejé.
Continué trabajando como ingeniero durante dos años en esa fábrica y seguí abonando a mis deudas. Las mismas eran muy grandes, por ello ahí no las pagué por completo.
Un mejor trabajo
A los 25 años conseguí un mejor trabajo como ingeniero, pero ahora en Estados Unidos. Al obtener el empleo ya tenía una novia. Y me casé con ella y me vine para Florida.
Yo siempre he sido la única fuente de ingresos, por ello desde que tengo 15 años apoyo a mi familia. Actualmente lo sigo haciendo además de cubrir todos mis gastos y ser completamente independiente.
Luego, para los 26 años por fin logré acabar con esa deuda de $800,000 pesos. Esto fue posible gracias a los buenos hábitos financieros que adquirí durante los 11 años de experiencia que tenía.
Empresa de contenido educativo
Después, además de mi trabajo completo como ingeniero, empecé mi empresa de contenido educativo. Donde me dedico a crear material para diferentes plataformas. Entre ellas YouTube, Facebook, Instagram, tik tok y mi sitio web. Aquí ya tengo más de 100 artículos de finanzas personales e inversiones totalmente gratis.
Continuando mi historia, a los 27 años por fin logré mi primer millón de pesos. Logre convertirme en millonario. No fue algo fácil ni rápido. Me tomó 12 años llegar a este punto. A lo largo de esos 12 años siempre estaba haciendo cosas adicionales a lo que hace el promedio de las personas. Estudiaba de tiempo completo pero también emprendía negocios nuevos. Estos ingresos extras me ayudaron a llegar a donde estoy ahora.
Hábitos que me hicieron millonario
El primero de estos hábitos fue invertir en mí mismo. Desde que tengo 15 años, si no es que, desde antes, dedicaba tiempo a desarrollar nuevas habilidades. Es decir, aprender cosas nuevas.
Inglés
Concretamente, lo primero que hice fue aprender inglés. Esto te abre las posibilidades a un mundo de información, la cual en español no vas a encontrar. En español el contenido es mucho más limitado, y es algo que estoy tratando de cambiar en el tema de finanzas personales e inversiones. Pero hay muchos otros temas como negocios donde el contenido es extremadamente limitado. Si no sabes inglés estás en una desventaja muy grande.
Además de eso, me capacité constantemente y estudié una carrera. Aunque realmente eso no fue lo que me hizo millonario me ayudó a aumentar mis ingresos solo por el hecho de tener un título.
Incluso hice una maestría. Al año de terminar la carrera la inicié y la terminé. Así que también tengo una maestría en administración de empresas. Sin embargo, no me ha ayudado mucho a aumentar mis ingresos.
Negocios
He hecho varios experimentos en negocios y he aprendido muchas cosas desde que tengo 15 años. Algunas han funcionado y otras no. Todo esto sólo viene con la experiencia y el tiempo. Realmente el contenido teórico es bueno, pero no lo es todo. Cuando me gradué de ingeniero mecánico tuve mi primer trabajo en una maquiladora y me di cuenta de que no sabía nada, había pagado casi un millón de pesos en mi educación y no sabía nada, tuve que aprender todo desde cero, realmente la teoría es muy diferente a la práctica.
Aprender por mí mismo
La educación sí me sirvió para encontrar información por cuenta propia y aprender por mí mismo. Es decir, sin necesitar a un profesor o alguien que me estuviera diciendo qué hacer. Eso lo apliqué en mi vida, y por esa razón, ahora cualquier conocimiento que quiero adquirir sé cómo encontrarlo.
Eso me ayuda mucho porque me puedo capacitar constantemente y muchas de esas cosas son totalmente gratis. En internet está todo. Sin lugar a duda, la habilidad de aprender por cuenta propia es lo que más me ha ayudado. Gracias a ello puedo seguir invirtiendo en mí mismo.
Tomar acción para convertirte en millonario/a
El segundo hábito que desarrollé y me convirtió en millonario fue el de tomar acción. Hay dos tipos de personas: las que ven las cosas pasar y las que hacen las cosas. Yo decidí ser la segunda, tomar acción.
No te sirve de nada si te la pasas estudiando, aprendes muchas cosas, pero todas en papel, en teoría. Yo cada vez que estudiaba algo lo ponía en la práctica. Analizaba qué hacer mañana para empezar el siguiente negocio. Buscaba desarrollar un plan para tomar acción, realmente eso es lo más importante.
Si no tienes suficiente conocimiento, no te preocupes. Empieza con lo que sepas y sobre la marcha irás aprendiendo.
Desarrollar múltiples fuentes de ingresos
El tercer hábito que me convirtió en millonario fue el de desarrollar múltiples fuentes de ingresos. No puedes depender de una sola fuente de ingresos. Como fue mi caso, a lo largo de 12 años tuve bastantes empleos, constantemente el ingreso iba aumentando. Y a la fecha sigo haciendo lo mismo. No dejo de crear negocios o estar buscando nuevos empleos.
Tú lo que puedes hacer es crear algo con el tiempo que tienes libre. Todas las horas que te quedan después del trabajo es importante que las destines a generar múltiples fuentes de ingresos. Esto es exactamente lo que yo hago con este negocio de contenido educativo.
Cuando me convertí en millonario ya tenía seis fuentes de ingresos. Actualmente voy a desarrollar la séptima. Hay un estudio que dice que el millonario promedio tiene siete fuentes de ingresos. Yo creo que es bastante acertado. Entonces, sin importar qué haces, necesitas buscar maneras de generar ingresos adicionales. Esto es algo que a mí me sirvió mucho para convertirme en millonario.
Aprender sobre finanzas personales
El cuarto hábito que me convirtió en millonario fue el de aprender sobre finanzas personales. Realmente, aunque mi ingreso llegó a ser elevado, mis gastos eran mayores. Así nunca me habría convertido en millonario. Tuve que aprender cómo salir de deudas y ahorrar.
Hoy en día manejo un presupuesto, y mis gastos son realmente bajos. A pesar de que soy la única fuente de ingresos, y tengo una esposa y una familia a la que apoyo, me queda mucho dinero para ahorrar.
Estos avances los logré porque controlo mis gastos. Los mantengo lo más bajos posible. Por lo tanto, si no te alcanza porque estás ganando todavía muy poco, tienes que buscar maneras de aumentar tus ingresos. Y quizás de no gastar tanto.
Hábito del Ahorro
Yo me cuidé mucho de no gastar todo lo que tenía y logré tener un ahorro que primero usé para pagar mis deudas. Luego lo comencé a invertir.
El hábito del ahorro es muy importante. No importa cuánto ganes, necesitas primero controlar tus finanzas. Para dominar el juego del dinero. Y así podrás convertirte en millonario.
Cuidarme de la inflación del estilo de vida
El quinto hábito que me hizo millonario fue cuidarme de la inflación del estilo de vida. A pesar de que cometí graves errores como comprar un carro nuevo, con base a eso aprendí a no volver a hacerlo. Ahora que mis ingresos son muchísimo más elevados, sigo gastando mucho menos de lo que podría gastar.
Vivo en un departamento pequeño, tengo mis gastos controlados, y por eso tengo una gran cantidad que puedo invertir cada mes. Pero si no me hubiera cuidado de la inflación del estilo de vida, así como mis ingresos subieron, hubieran subido mis gastos o peor aún, hubiera gastado mas de lo que ganaba y en vez de tener un millón ahora tendría deudas.
Generar activos
El sexto hábito que me convirtió en millonario fue generar activos antes de pasivos. Es un concepto bien sencillo que nos dice Robert Kiyosaki en sus libros. Un millonario primero invierte el dinero y ve cómo generar más dinero con lo que ya tiene. Luego, lo que nos sobra, eso sí lo usamos para los gastos.
Sin embargo, muchos hacen lo contrario. Primero gastan, y después lo que sobra, que no es nada, es lo que ahorran o invierten.
Trabajar de manera excesiva
El séptimo hábito que me convirtió en millonario es trabajar de manera excesiva. Mucha gente te va a decir “trabaja de manera inteligente y no duro”. Pero eso es completamente falso. Con todos los negocios y empleos que he tenido me di cuenta de que el que sale adelante es el que trabaja el doble.
En mi caso, yo busqué la manera de hacer las cosas eficientemente de manera productiva. Me enfoqué en optimizar el tiempo lo más que pudiera, pero también buscaba trabajar el doble o más.
La realidad es que eso fue lo que me convirtió en millonario, trabajar de manera excesiva.
Delegar
El octavo hábito que me convirtió en millonario fue aprender a delegar, porque después de trabajar de 12 a 16 horas diarias por mucho tiempo aprendí que yo no puedo ser el mejor en todo. Pero sí le puedo pagar a alguien que lo pueda hacer mejor que yo.
Así puedes ahorrar mucho tiempo. Y conforme más ganas, te vas dando cuenta que el recurso más valioso no es el dinero, es el tiempo.
Yo pagaría lo que fuera por tener más tiempo disponible. Entonces, constantemente busco la manera de delegar actividades. Aunque las pueda hacer bien, alguien las hará mejor que yo. Incluso hay cosas que no valen la pena que le destinemos el tiempo en aprenderlas si podemos pagarle a alguien o incluso usar una herramienta de Software que ya existe para facilitar la vida. Ese tiempo ahorrado tú puedes destinar a tu siguiente negocio.
Invertir
El noveno hábito que me convirtió en millonario fue el de invertir. A pesar de que las ganancias con mis inversiones no son tan grandes ya que voy empezando, el poder de la inversión se halla en el interés compuesto.
Los primeros años, las aportaciones adicionales van a crecer tu portafolio, pero con el tiempo generarás más dinero por los rendimientos que por lo que aportas.
La razón por la que invertir me hizo millonario es porque para mí se me hizo una adicción. Eso de manera indirecta se convirtió en un tipo de ahorro. Ahora prefiero en vez de gastar, invertir. Por este motivo, antes de comprar cualquier cosa me pongo a pensar si mejor lo invierto en la bolsa o en algún otro instrumento.
Desarrollé un hábito en mí para constantemente seguir haciendo aportaciones adicionales a mi portafolio. Quizás invertir no me convirtió en millonario por los rendimientos. Pero te aseguro que por los rendimientos y el interés compuesto invertir me va a convertir en más que millonario. Pasaré a ser multimillonario con el paso del tiempo.
Si deseas ampliar esta información te invito a ver el siguiente video o hacer click aquí.
tiene usted mucha razon aveces lo sabemos pero necesitamos que alguien mas no los diga…
Muchas gracias por su comentario Antonio!